Las emociones en política [reflexión]
Las emociones no son un problema para planificar nuestra estrategia política. Lo que sienten las personas es la mejor respuesta a cómo construir un relato, las propuestas y hasta las decisiones estratégicas.
Las emociones no son un problema para planificar nuestra estrategia política. Lo que sienten las personas es la mejor respuesta a cómo construir un relato, las propuestas y hasta las decisiones estratégicas.
La comunicación política implica la capacidad de generar contenidos y difundirlos con éxito, en base a unas acciones que, incluidas dentro del plan de marketing, tienen en cuenta la estrategia y objetivos de la organización política, institución o marca personal para la que se trabaja.